El lenguaje cinematográfico: De Meliès, Lumiere y Edison, a D.W.Griffith

Thomas Alva Edison, los hermanos Lumiére y Georges Méliès inauguran el campo de experimentación de las imágenes en movimiento. Los tres, además de desarrollar y perfeccionar la proyección de las películas, hacen uso del cinematográfo con fines de entretenimiento; es en esta primera época en la que se realizan pequeñas filmaciones de actividades que rozan en lo cotidiano y cuyo fin interesante no va más allá de la proyección y reproducción de dichas actividades, a esto se debe el que las películas de Edison y de los hermanos Lumiére sean más parecidas a un "catálogo de sucesos" que a un relato extra-ordinario, como comenzaría a suceder con las películas Méliès. Méliès se distancia de Edison y de los Lumiére al llevar la experimentación un paso más allá, haciendo uso de los primeros efectos especiales. La edición de la película nunca había sido experimentada de la manera en que Méliès lo propuso; el cortar y pegar un trozo de película o el simplemente hacer desaparecer algún personaje con esta técnica de edición, abrió nuevas posibilidades al cine. Sin embargo, en esa primera época del cine, la forma de observar un suceso siempre se asemejaba a la forma en la que se observaba una obra de teatro, siempre manteniendo una distancia uniforme, siempre con movimientos que remitían al movimiento natural del ojo. Es hasta que se exploran otras formas de encuadres que esa forma de observar a través del cine cambia. La cámara permite realizar un acercamiento, enfatizar acciones y matizar las películas con esos efectos. D.W.Griffith es conocido como el director que supo identificar las posibilidades narrativas que ofrecía la cámara para el cine; usó dichas posibilidades para adentrar al espectador en emociones que parecían más "reales", más fáciles de apropiar, y con eso cultivó la creación de un lenguaje cinematográfico.